26.11.06

El Sueño de la Razón


Los fusilamientos del tres de mayo (1814)
Francisco de Goya y Lucientes (1746 - 1828)


Sólo Brueghel y El Bosco habían extraído antes que él
estos monstruos de las grandes profundidades.

André Malraux (1901 - 1976)

“Luego de una enfermedad que contrajo en Cádiz, en 1792, Goya había emergido casi sordo de esa desgracia y ella, como suele ocurrir, agrió su carácter, su visión de la vida, la cual se vio confirmada por los horrores de los ejércitos napoleónicos en su tierra española. Habría entonces de escribir una frase que atravesó las décadas: “El sueño de la razón engendra monstruos”. Qué duda cabe: el sueño de la razón que soñó la Revolución Francesa y la liberación de los hombres, la igualdad, la fraternidad, había producido los monstruosos soldados que fusilaban a los despavoridos españoles. Goya había hecho su aporte a toda una corriente de la filosofía que ve en la razón el extravío de la historia humana. Algo así se cree cuando se comprueba que la historia humana podrá ser cualquier cosa, pero no es racional. Algo así se cree cuando las guerras no dejan de sucederse y llevan, por fin, hacia los horrores del siglo XX, los campos de exterminio (racionalmente organizados), la tortura (racionalmente aplicada) y la desaparición de personas (racionalmente planeada).”

El texto completo, acá

Más obras de Goya, acá


Alicia II



 Alicia y Humpty Dumpty
Texto de Lewis Carrol (1832 - 1898)
Ilustraciones de sir John Tenniel (1820 - 1914)


Cuando yo uso una palabra --insistió Humpty Dumpty con un tono de voz más bien desdeñoso-- quiere decir lo que yo quiero que diga..., ni más ni menos.

--La cuestión --insistió Alicia-- es si se puede hacer que las palabras signifiquen tantas cosas diferentes.

--La cuestión --zanjó Humpty Dumpty-- es saber quién es el que manda..., eso es todo.

El texto completo, acá

Alicia


Alicia y el gato de Cheshire
Texto de Lewis Carrol (1832 - 1898)
Ilustraciones de Sir John Tenniel (1820 – 1914)

Minino de Cheshire --empezó Alicia tímidamente, pues no estaba del todo segura de si le gustaría este tratamiento: pero el Gato no hizo más que ensanchar su sonrisa, por lo que Alicia decidió que sí le gustaba--. Minino de Cheshire, ¿podrias decirme, por favor, qué camino debo seguir para salir de aquí?


--Esto depende en gran parte del sitio al que quieras llegar --dijo el Gato.


--No me importa mucho el sitio... --dijo Alicia.

--Entonces tampoco importa mucho el camino que tomes --dijo el Gato.

--... siempre que llegue a alguna parte --añadió Alicia como explicación.

--¡Oh, siempre llegarás a alguna parte --aseguró el Gato--, si caminas lo suficiente!

A Alicia le pareció que esto no tenía vuelta de hoja, y decidió hacer otra pregunta:

¿Qué clase de gente vive por aquí?

--En esta dirección --dijo el Gato, haciendo un gesto con la pata derecha-- vive un Sombrerero. Y en esta dirección --e hizo un gesto con la otra pata-- vive una Liebre de Marzo. Visita al que quieras: los dos están locos.

--Pero es que a mí no me gusta tratar a gente loca --protestó Alicia.

--Oh, eso no lo puedes evitar --repuso el Gato--. Aquí todos estamos locos. Yo estoy loco. Tú estás loca.

--¿Cómo sabes que yo estoy loca? --preguntó Alicia.

--Tienes que estarlo afirmó el Gato--, o no habrías venido aqui.


El texto completo, acá

24.11.06

Tres Ratones Ciegos



 Three Blind Mice
John W. Ivimey - Walton Corbould



I
Tres ratones ciegos
tres ratones ciegos
se arrancaron los ojos
y se los comieron


II
Tres ratones ciegos
tres ratones ciegos
se cayeron a un pozo
nunca lo supieron


III
Tres ratones ciegos


IV
Tres



22.11.06

Muerte, no seas orgullosa




Los embajadores (1533)
Hans Holbein el Joven (1497? - 1543)


Vanidad de vanidades, porque todo es vanidad
Eclesiastés

Muerte, tú también habrás de morir
John Donne (1572 – 1631)

Hans Holbein el Joven pintó en 1533 el cuadro Los Embajadores. Dicha obra presenta como característica una calavera distorsionada en el centro inferior del espacio pictórico. Esto se debe al uso (en aquellos momentos experimental), del efecto conocido como anamorfosis. ¿Qué rol cumple esta calavera? Hay varias respuestas posibles.
Por una parte, es posible que haya sido una pequeña broma del autor, cuyo apellido significa en alemán “hueso hueco”. Así, la calavera sería su firma en un juego de palabras devenido imagen. También es probable que haya cumplido el rol de retratar el tercer nivel (la muerte), mientras que los otros dos estarían significados por los objetos superiores como el astrolabio (los cielos), y el medio por los libros y los instrumentos musicales (el mundo de los vivos).
Los personajes retratados son Jean de Dinteville (izquierda), embajador francés en Londres; y el obispo de Lavaur, Georges De Selve (derecha). El primero está vestido con ropas seculares mientras que el segundo viste un atuendo protestante. La mesa que hay entre los dos, y sus objetos, parecen insinuar una alianza entre el capitalismo y la Iglesia, un mensaje conciliador para un continente en guerra.
Sin embargo, el mensaje que nos deja Holbein es más profundo y perturbador que todo lo anterior: bajo ese mundo de vanidades y apariencias, subyace la muerte. ¿Y acaso no es la vanitas una forma de esconderse del memento mori? El autor no nos muestra la calavera en la misma perspectiva que el resto de los objetos en el cuadro, sino que mediante una ilusión óptica nos obliga a buscar otras formas, otras perspectivas para que nos sea revelada en su forma condensada aquella verdad: la de nuestro propio fin. Un mensaje dentro de un mensaje, en un espacio curvo de un juego de reflejos. Los embajadores han muerto, como lo ha hecho el pintor. También nosotros, observadores, seguiremos la misma suerte. Sólo se necesita una cuchara para ver a la calavera riendo. Riamos nosotros de ella también, para demostrarles que aún estamos vivos.



17.11.06

Viceversa


Concepto Espacial, 1959

“En lo que me concierne personalmente, quiero subrayar que lo que hago no es precisamente pintura; es, en todo caso, una manifestación de arte plástica. ¿Los tajos y los agujeros? Ah sí, he aquí mi búsqueda más allá del plano usual del cuadro, hacia una nueva dimensión El espacio. Un gesto de ruptura con los límites impuestos por la costumbre, por los usos, por la tradición, pero -que sea claro- madurada en el honesto conocimiento de la tradición, en el uso académico del escalpelo, del lápiz, del pincel, del color. Hace tiempo, un cirujano que vino a mi estudio me dijo que "esos agujeros" los podía hacer él perfectamente. Le contesté que yo también se cortar una pierna, pero después el paciente muere. Si la corta el, en cambio, el asunto es distinto. Fundamentalmente distinto.”

Lucio Fontana (1899 - 1968), 1966.

Más imágenes, acá

14.11.06

El Escudo de Arquíloco


Ayax portando el cuerpo de Aquiles

Queremos destruir todos los monumentos ridículos "a aquellos que han muerto por la madre patria" que se nos aparecen en cada pueblo, y erigir en su lugar monumentos a los desertores. Los monumentos a los desertores representarán a todos aquellos que murieron en la guerra, pues cada uno de ellos murió maldiciendo la guerra y envidiando la felicidad del desertor. La resistencia nace de la deserción.
Partisano antifascista, Venecia 1943.

Enfrentado al riesgo de morir a manos de los tracios, el poeta Arquíloco prefiere abandonar sus armas para seguir viviendo. De este modo, antepone el valor de su propia vida, y en general, de la vida humana, al ideal heroico que Grecia exige a sus soldados. Al negarse a disfrazar "a las víctimas como mártires", Arquíloco inaugura con su gesto un modelo de pensamiento que, como el grotesco recuperado por Bajtín, nunca pasó a formar parte del canon clásico que el Renacimiento elaboró y legó a la cultura occidental. Un modelo de cuya estirpe apenas si habrían quedado algunas huellas, como la estremecida exclamación de Sebastián Castellión ante el asesinato de Servet, perpetrado por Calvino: "Matar a un hombre no es defender una doctrina", dijo. "Es matar a un hombre".

Como Bajtín en el ámbito de la estética, Juan Aranzadi podría estar recuperando con El escudo de Arquíloco una ética clásica no canónica, capaz de fundamentar la felicidad, no en el honor o la valentía, no "en el diálogo o, mucho menos, el enfrentamiento violento", sino en el hecho de "huir, desplazarse, cambiar de lugar y de gente, irse a vivir con otro grupo", hasta disolver cualquier "ilusión de pertenencia a un pueblo"

La entrevista a Juan Aranzadi, acá


12.11.06

La Vuelta de Fierro



El Sueñero, de Enrique Breccia

En 1992 salía por última vez la Revista Fierro, paradigma de la historieta argentina durante los años post-dictadura. La apertura de mercado más el óxido acumulado en la mecánica de la narrativa local hicieron inviable la continuación del proyecto que había dado algunos de los mejores trabajos hechos en mucho tiempo. Hoy podemos decir con felicidad que Fierro ha vuelto.
Dirigida por Juan Sasturain, e impulsada desde Página/12, los viejos pesos pesados vuelven a juntarse para la (re)construcción de una historieta argentina, que acaso también sea una experiencia argentina de la historieta. La promesa de nuevos talentos y nuevas historias con los mismos viejos temas (¿no consiste en eso la experiencia artística?), hacen de esta nueva etapa de Fierro algo deseable, destacable y recomendable. Sale $4, tiene 62 págs. y se vende en los kioscos. Haceme caso, andá a comprarla.


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11.11.06

La Palabra Desnuda, la Palabra Perfecta



Juan Ramón Jiménez (1881 - 1958), ca. 1900
 
Madrid 17 de enero

II

Raices y alas. Pero que las alas arraiguen
y las raíces vuelen.


Madrid, 20 de enero

IV

Clavo débil, clavo fuerte...
Alma mía, ¡qué más da!
Fuera cual fuera la suerte,
el cuadro se caerá.

De Diario de un poeta recién casado (1916)

Más poesías de J. R. Jiménez, acá

7.11.06

Karen O.


 
You shared a cab with Karen O, Oh Ohh Oh Oh Ohh...
"Give Blood",
de Brakes



El BUE Fest, si bien se dividió en dos fechas, tuvo su apogeo en la segunda, el sábado 04 de noviembre. El plato fuerte eran Yeah Yeah Yeahs y Daft Punk, y sobre estos estuvo centrada la cobertura de los medios, a menudo fallida y distante, como quien hace trámites con carné de periodista. Lo cierto es que muchas bandas y djs alegraron la noche, que fue verdaderamente una fiesta. No pasó nada de eso que todos esperan que pase, sobre todo teniendo en cuenta que éramos 20.000 personas, con alcohol y drogas a rolete. Mi solitaria perspectiva fue por momentos apesadumbrada por su misma naturaleza, pero lo cierto es que la soledad nunca es absoluta, puesto que siempre que se está solo, se está solo con respecto a alguien más. Será entonces mi objetivo hacer un pequeño ejercicio de análisis sobre mi experiencia, el acontecimiento y algunas otras cosas que surjan por el camino.

Sigue acá

1.11.06

La Anomalía Salvaje

SPINOZA (1964)

Las traslúcidas manos del judío
labran en la penumbra los cristales
y la tarde que muere es miedo y frío.
(Las tardes a las tardes son iguales.)

Las manos y el espacio de jacinto
que palidece en el confín del Ghetto
casi no existen para el hombre quieto
que está soñando un claro laberinto.

No lo turba la fama, ese reflejo
de sueños en el sueño de otro espejo,
ni el temeroso amor de las doncellas.

Libre de la metáfora y del mito
labra un arduo cristal: el infinito
mapa de Aquel que es todas Sus estrellas.

Jorge Luis Borges (1899 - 1986)